Fernando Goin
2010. "Todos somos superhéroes".
Por Elipsis
Ante tanto abuso de poder, me preguntaban si a eso se le podía llamar "poder": quizá pre-potencia como poder desmedido y preconceptual, previo al acuerdo y fuera de todo límite racional; ante un poder absoluto de esa naturaleza (el crimen organizado, el Estado, la incultura laboral, la violencia social) sólo nos queda la im-potencia, que es incapacidad para generar vida. Muy atrás quedó la oposición de autoridad a poder, porque hoy no hay necesidad de justificar nada, se hace porque se puede, y ahí está la tragedia ¿cómo es que los rencorosos, los acomplejados sociales, los perversos llegaron a poder? No hay otra respuesta posible más que: Porque lo permitimos.
Todavía más, el poder nos está desnudo, es poder político, es decir, poder que controla, que desvanece vidas y que se oculta detrás del rostro de la representación social. Y justamente, como su cometido es la desubjetivización, comienza despersonalizándose así mismo, el que tiene poder, es un poco cada día menos humano, porque necesariamente necesita colocarse en una posición más allá de lo humano para poder solventar su existencia, en ese sentido es un poder sobre humano; también los villanos tienen superpoderes; y los héroes pareciera que nos han abandonado, esperemos que no y que nuestra fuerza vital, sea aquello que podamos anteponer al poderoso y abusivo, repesando la forma de vivir en sociedad, necesitamos descubrir nuestros superpoderes, las neurociencias dicen que ahí están, ocultos detrás de nuestro miedo; debemos urgentemente comenzar a soñar, a contrarrestar eso que nos hace débiles, el individualismo, el egoísmo y la envidia.
Es la hora de los superhéroes, y sí: "Nos pusimos la máscara" para que se fijaran en nosotros, pero detrás de la máscara está cualquiera que quiera ser héroe.